Una mezcla de mango, jazmín, sándalo y nardos, hacen del perfume, bebe, un manjar para los sentidos. Y es esto lo que el reconocido Francis Kurkdjian, experto frangancias, quiere causar con una exquisita mezcla floral y oriental.
En una botella en forma de corazón que evoca las curvas femenias, la marca busca llegar a las mujeres que desean sentirse sexys en todo momento.